martes, 24 de noviembre de 2009

EL PRIMER ALFABETO

Alfabeto: palabra de origen griego formada a partir de alpha y beta, nombre de las dos primeras letras de su abecedario, serie de signos escritos que cada uno representa un sonido o más de uno que se combinan para formar palabras posibles de una lengua dada.


El alfabeto es otra interrogante que se abre inevitablemente en el tema de la escritura. Sabemos que los griegos fueron quienes introdujeron la idea del alfabeto pero, ¿fueron ellos realmente los pioneros?¿Por qué era tan necesaria la invención del alfabeto?¿Acaso para agilizar las operaciones comerciales?


Los primeros indicios de escritura alfabética fueron hallados en antiguas minas del Sinaí, que habían pertenecido a los egipcios. Petrie, el autor del hallazgo, observó que la escritura, por su pequeño número de caracteres, parecía ser alfabética, y que plasmaba el idioma semítico.




EL ALFABETO GRIEGO Y LATINO






El hecho de que las grafías en latín y griego sean diferentes tiene su razón en que el alfabeto latino procede de uno de los dos alfabetos oficiales que convivieron durante mucho tiempo en Grecia, el euboico, que fue el que se exportó a Italia y más tarde usaron los etruscos y latinos; mientras que el actual alfabeto griego se vale del jónico, alfabeto que se impuso en Grecia como obligatorio en los documentos a partir del 402 a. de C. Es por ello que hoy la apariencia de ambas escrituras es diferente, pero las diferencias son puramente formales: la mayoría de los signos coinciden.




LOS ALFABETOS SEMÍTICOS


Su característica común es la de que sólo anotan 22 símbolos, todos ellos consonánticos. Los sonidos vocálicos han de ser instruidos por el lector a partir de una serie de "puntos" cuya posición indica el sonido pertinente en cada caso. Dos ejemplos de escritura semítica son el HEBREO y el ARAMEO. El hebreo es la lengua de los judíos ortodoxos, con sus modalidades; el arameo fue el sistema oficial de varios imperios, llegando incluso hasta la India.




EL ALFABETO ÁRABE


Nació en la primitiva comarca árabe de los nabateos, que hablaban una variante del árabe, que transcribían con el alfabeto arameo. Poco a poco fue apareciendo un sistema de ecritura "nabateo-arameo", precursor de la escritura árabe, que nacería a mediados del primer milenio, desplazando al arameo. Hoy cuenta con 28 consonantes y ninguna vocal.